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domingo, 10 de marzo de 2013

EL RESFRIADO

Moqueo, estornudos, dolor de garganta y fastidiosa tos; todos sufrimos en algún momento de un resfriado común. Dado que los niños llegan a tener hasta ocho o más resfriados por año, esta infección viral contagiosa que afecta las vías respiratorias superiores es la enfermedad infecciosa más común de los Estados Unidos y el principal motivo de consulta al médico y de ausencia escolar.
La mayoría de los resfriados son causados por los rinovirus (el nombre proviene de la palabra griega rhin, que significa "nariz") que se encuentran en pequeñas gotas invisibles presentes en el aire que respiramos o en las cosas que tocamos.
Existen más de 100 rinovirus diferentes con la capacidad de penetrar en el revestimiento de protección de la nariz y la garganta y provocar una reacción del sistema inmunológico capaz de causar dolor de garganta, dolor de cabeza, o de hacer que a su le resulte difícil respirar por la nariz.
El aire seco -en el interior o el exterior - disminuye la resistencia  a las infecciones provocadas por los virus causantes de los resfriados. Fumar o estar cerca de un fumador tiene el mismo efecto. Los fumadores tienen más probabilidades de pescar un resfriado que quienes no fuman; y es posible que sus síntomas sean más graves, más duraderos y es más probable que deriven en una bronquitis o incluso una neumonía.
Pero aunque digan lo contrario, nadie se resfría por no llevar una chaqueta o un suéter cuando está fresco, por sentarse o quedarse dormido en un lugar con corriente de aire, o por salir con el pelo mojado.
Los primeros síntomas de un resfriado suelen ser picazón en la garganta, nariz congestionada o que gotea, y estornudos. Tal vez,  también presenten dolor de garganta, tos, dolor de cabeza, fiebre moderada, cansancio, dolores musculares y pérdida del apetito. Las secreciones de la nariz  pueden pasar de ser acuosas a ser espesas y de color amarillento o verde.
Los resfriados son contagiosos durante los primeros 2 a 4 días posteriores a la aparición de los síntomas. Puede pescarse un resfriado inhalando partículas de virus diseminadas en el aire por el estornudo o la tos, o por contacto directo con otra persona. Si su hijo se toca la boca o la nariz después de tocar la piel o alguna otra superficie contaminada por alguno de los rinovirus que provocan resfriados, es probable que se pesque un resfriado.
Diez consejos para aliviar los síntomas del resfriado: 
1. Descansar todo lo que sea posible, especialmente si se presenta fiebre. De esta forma, permitiremos que nuestro organismo recupere fuerzas.
2. Mantener un ambiente cálido y sin excesiva humedad.
3. Evitar los cambios bruscos de temperatura y las bebidas excesivamente frías –con hielos- o calientes.
4. Dejar de fumar y evitar los ambientes con humo, ya que irritan todavía más nuestra garganta y mucosas.
5. Alimentarse adecuadamente. Especialmente con frutas y verduras, que son fuentes de vitaminas y minerales que ayudan al cuerpo a desarrollar sus propias defensas.
6. Beber gran cantidad de líquidos. Puesto que ayudan a eliminar la mucosidad, previenen la deshidratación y alivian el dolor de garganta. Sin embargo, hay que evitar las bebidas alcohólicas, que pueden interferir con la medicación.
7. Realizar aspiraciones de agua con sal o vahos de eucalipto. Para aliviar la congestión nasal. Se consigue también una acción expectorante. En el caso de niños pequeños con exceso de mucosidad, se recomienda el lavado nasal con suero fisiológico 15 minutos antes de las comidas y antes de irse a dormir.
8. Beber mucho y hacer gárgaras con agua caliente con limón y miel. La acción emulgente nos permite calmar el dolor de garganta. A pesar de la creencia popular, es preferible emplear agua a frente a la leche con miel, ya que los lácteos pueden aumentar la mucosidad.
9. Consultar al farmacéutico y evitar la automedicación. Como profesional de la salud, el farmacéutico sabrá aconsejarnos tanto acerca de hábitos saludables como de los distintos tratamientos a nuestro alcance. Además, si se quiere recurrir a fármacos que alivian los síntomas, como antigripales, descongestivos, o analgésicos, es indispensable contar con su asesoramiento o el de un médico.
10. Cuidado con los antibióticos. Es muy importante que no se tomen antibióticos por cuenta propia: además de que no son efectivos contra el catarro, ya que este está causado por un virus y no por una bacteria, el hecho de utilizarlos de manera incorrecta o frecuente puede hacer que nuestro organismo se haga resistente a ellos. Esto implica que, cuando realmente los necesitemos para tratar alguna enfermedad, podrían no hacernos ningún efecto.
Si, aún teniendo en cuenta estos consejos, en el transcurso de dos semanas no hemos notado una mejoría, es conveniente acudir al médico de cabecera, para descartar posibles complicaciones.

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